Aislamiento.
En una sociedad sumida en la indiferencia, hay personas que viven en un aislamiento total, sin contacto con el mundo exterior. Están apartadas de cualquier oportunidad que pueda rescatarlas de esta isla de soledad. Cada día se convierte en una lucha silenciosa, una batalla contra la invisibilidad y el olvido. La falta de conexión humana les roba la esencia de lo que significa ser parte de una comunidad, dejándolas atrapadas en un limbo de aislamiento emocional y social.